Quienes sigan habitualmente el fútbol argentino recordarán con angustia el golpe que le costó la vida a Emanuel Ortega, en 2015. Dos años más tarde, en un accidente similar,Alan Sherriff del Argentino de Merlo golpeó la cabeza contra un paredón perimetral, aunque por suerte pudo seguir jugando tras ser atendido.
Pero esta falta de protección y prevención no es propia del fútbol argentino. El último fin de semana, en España, ocurrió un hecho similar que a punto estuvo de convertirse en tragedia.
Saúl Coco, futbolista de Las Palmas C, que milita en la Tercera División del fútbol español, llegó muy exigido a la línea de fondo disputando el balón con un rival y no pudo frenar antes de impactar con el paredón que estaba casi pegado a la misma.
Todos los jugadores detectaron de inmediato el riesgo de lo sucedido. Algunos se tomaban la cabeza, otros pedían desesperados la llegada del personal médico.
El golpe contra el paredón le costó a Saúl Coco la fractura de sus dos muñecas, producto del movimiento que realizó para no impactar de lleno con la cabeza.
“No ha sido la mejor manera de cumplir años, para qué mentir. Todo ha salido bien. Muchísimas gracias a todos por las felicitaciones y los mensajes de apoyo”, publicó el futbolista en Twitter, mientras se recupera de su acidente.