Si bien este jueves se decidió que haya una multa económica por el fichaje irregular de Antoine Griezmann, la sanción deja más conforme al Barcelona, el castigado, que al Atlético Madrid, la víctima.

Es que el Comité de Competición creyó suficiente aplicar al club culé una multa de 300 euros, según avanzó el diario español El Mundo.

El organismo federativo ha resuelto zanjar con una mínima sanción el expediente, en el que el instructor proponía, dada la escasa cuantía de la sanción establecida en la normativa, que elBarçadisputara un encuentro a puerta cerrada en el Camp Nou.

Barcelona cerró el pasado mes de marzo el fichaje de Griezmann. Así lo atestiguan los correos electrónicos que había revelado el diario El Mundo y que acreditan que en plena eliminatoria contra la Juventus de Turín, el jugador francés cerró el acuerdo con el club azulgrana y negoció el pago de 14 millones en comisiones a su entorno.

El Comité de Competición rechazó, por otra parte, el cierre del Cam Nou que había propuesto el juez instructor de la causa.