En apenas media hora de partido, parecía que todo estaba definido: el West Ham tuvo un arranque impresionante ante el Arsenal y de local, ya ganaba 3-0.
Con goles de Jesse Lingard, Jarrod Bowen y Tomas Soucek, el marcador se inclinó muy rápidamente a favor de los ‘Hammers’ y muchos apagaron el televisor pensando que ya sabían el final de la historia.
Pero por algo amamos al fútbol. El conjunto de Mikel Arteta no bajó los brazos más allá de las adversidades y de a poco, se fue metiendo en partido.
¿Lo más llamativo de todo? Descontó por duplicado con goles en contra del rival. Primero el propio Soucek y luego en el complemento Dawson para que la visita quede a un gol del empate.
Y llegó gracias a Alexandre Lacazette, quien estampó el 3-3 final para provocar la locura del banco de suplentes y de sus compañeros en cancha.
De esta manera, los ‘Gunners’ siguen bien lejos en la tabla teniendo 42 unidades mientras que el West Ham, último clasificado a competencias internacionales para la próxima temporada, marcha quinto con 49 puntos.
¿El puntero? El gran Manchester City de Guardiola, que ya le sacó 14 de ventaja al segundo acumulando 22 victorias, cinco empates y tres derrotas.