Qué sigan los Merengues poniendo en duda las virtudes de Karim Benzemá para quedarse en Real Madrid.
Qué sigan, porque en una temporada que ha sido oscura para el gigante blanco, el francés ha sido uno de los únicos jugadores que dio la talla.
Este domingo, ante Athletic de Bilbao, Benzemá acudió al rescate de un equipo que ya había despertado murmullos en el Santiago Bernabéu.
Le puso la cabeza a un centro preciso de Marco Asensio y ubicó el balón bien lejos de la posición de Herrerín.
Ah, y ya suma 28 goles en la temporada. Shhhh.