En julio de 2017, Villarreal anunció el fichaje del lateral portugués Ruben Semedo, por quien pagó 15 millones de euros al Sporting de Lisboa. Desde entonces, el futbolista permaneció más tiempo lesionado que siendo útil a la plantilla dentro del campo. Sin embargo, no es esto lo que lo convirtió en el peor fichaje de La Liga para la presente temporada.

Es que el jugador sumó ya su tercer incidente desde que llegó al Submarino Amarillo, siendo este último el más grave. Tanto que la Guardia Civil lo detuvo esta madrugada por estar acusado de atar, golpear y retener a un individuo en su casa para robarle.

El pasado 12 de febrero, el agredido acudió a una comisaría de Valencia para denunciar que había sido atado, golpeado y retenido por Semedo y otros dos hombres en el chalé del futbolista en Bétera.

El denunciante identificó tanto a Semedo como su primo como dos de las personas que le ataron y golpearon para luego robar en su piso que está cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. El hombre también declaró que uno de los agresores habría disparado dos veces con una pistola para intimidarle, aunque los tiros no le alcanzaron.

El portugués ya había sido detenido por la Policía Nacional en diciembre por encañonar con una pistola a un empleado de una conocida discoteca de Valencia y fue denunciado también por una agresión que cometió el pasado 29 de octubre a la salida de una discoteca.