Hasta que se hizo profesional, podría decirse que Raheem Shaquille Sterling jugó al fútbol como un escape, un salvoconducto que le enseñó a esquivar las balas que, a diario, iban y venían, en Maverley, una comunidad dominada por pandilleros en las afueras de Kingston, Jamaica, donde nació hace 27 años (8 de diciembre de 1994).
Ajeno a ese mundo del bajo hampa, Sterling tuvo en Nadine a su madre y a su padre en una misma persona. Ella, mamá Nadine, fue quien le inculcó todo y le dio, como pudo, protección y comida, mientras su padre no aparecía. En suma, amor y afecto, algo tan esencial para cualquier persona. Su apellido (Sterling) proviene de un Errol Sterling, una persona de suma confianza para Nadine porque, en 1996, el propio Raheem vio como asesinaban a su padre con un rifle M16 (hoy tiene tatuada esa arma en su pierna derecha).
Con ese golpazo, Nadine dejó a sus dos hijos al cuidado de una abuela y se marchó a Inglaterra para intentar cambiar su destino. Como pudo juntó libra sobre libra para, en menos de tres años (Raheem estaba por cumplir 6 años), reunirse con sus hijos en Europa. Su trabajo como mucama de hotel le dio el sustento para empezar a creer que había luz al final del túnel. Y sus hijos la seguían, la ayudaban con su trabajo. “Sabía que era algo que formaba parte de nuestras vidas. Tratamos de hacer una vida sencilla y, por eso, buscábamos ayudarla”, contó en una entrevista.
Con el trabajo como premisa fundamental, Raheem debió terciar con sus demonios para siempre. Tanto que, una vez más, el fútbol funcionó como catalizador y refugio cuando estuvo a punto de ser expulsado de las varias escuelas a las que asistió. Con una pelota entre sus piernas evadía todo, pero, sobre todo, esa esfera, lo ponía en foco. “El fútbol me ayudó de forma masiva y definitiva, especialmente, en Londres, que es un lugar con muchas distracciones”, dijo. Y el Queens Park Rangers fue el primer club europeo en el que jugó y se hizo conocido para el fútbol inglés. Allí jugó de 2003 a 2010 hasta que pasó a la Academia del Liverpool a cambio de 600.000 euros. Rafa Benítez, el DT de Los Reds en ese entonces, puso sus ojos sobre el ascendente delantero de origen jamaiquino que era una combinación de explosión y goles. Claro, Sterling ya descollaba en la Selección Sub-16, a la que había sido convocado un año antes de llegar a los Reds.
Dos años después debutó con el primer equipo de Liverpool en un partido de Premier League ante el Wigan Athletic, para convertirse en el tercer debutante más joven de la historia del equipo inglés con 17 años y 107 días. Al poco tiempo empezó su faena de goles. El 20 de octubre de 2012 llegó el primero en la victoria por 1 a 0, en el emblemático estadio de Anfield, ante el Reading. Un grito furtivo que lo encumbró como el segundo goleador más joven de la historia detrás de Michael Owen.
Su raid goleador en el Liverpool llegó a su fin a mediados de 2015 cuando el Manchester City abrió su frondosa billetera y desembolsó 49 millones de libras (68 millones de euros) para hacerse de Sterling que, a esa altura, lejos había quedado de esa promesa nacida en Jamaica. Lo suyo era una realidad concreta y derecha con un destino único: seguir haciendo goles. De hecho, la llegada de Pep Guardiola al equipo ciudadano lo potenció aún más. En su segundo año en el City, y con Guardiola como esencial motivador e impulsor, Sterling cosechó 23 goles entre Premier League, Liga de Campeones y FA Cup y muchas de sus conquistas fueron esenciales para que una buena parte de Manchester, la celeste, celebrara los títulos de la Liga inglesa y la Copa de la Liga.
Este año, Sterling dio otro salto. Del City a Chelsea luego de “no sentirse querido” en el Etihad Stadium de los ciudadanos, club en el que marcó 131 goles y ganó 12 títulos, todos en el ámbito local. “Todos quieren sentirse queridos, el fútbol no es diferente. Cuando juegas con todo tu corazón, sacrificas algunos de los cumpleaños de tus hijos y luego te tratan de cierta manera, es decepcionante. En ese momento estaba furioso, pero ya pasó, está en el pasado y solo puedo concentrarme en el presente, que es ahora, aquí en Chelsea, y la oportunidad que tengo aquí de salir y mostrar mis talentos, una vez más”, explicó el delantero. Y agregó: “Si no eres feliz jugando tu fútbol, tienes que buscar otras opciones para recuperar esa felicidad, y eso es exactamente lo que hice”.
Con la decisión macerada y pensada, Sterling pasó a los Blues a cambio de 53 millones de euros que podrían ascender hasta 65 en función de diferentes bonus y su contraro tiene fecha de expiración en 2027.
Inglaterra, en su momento de madurez:
Inglaterra es una de las selecciones más importantes del mundo, pero a la hora de las competiciones importantes (mundiales y Eurocopa) siempre se quedó en el debe. Los creadores del fútbol accedieron sólo a tres semifinales en citas mundialistas (ganaron la Copa en 1966) y hasta el momento, nunca ganaron la Eurocopa.
Candidatos para el Mundial de Qatar 2022, primero debe pasar el Grupo B que comparte con Estados Unidos, Gales e Irán. El equipo conducido por Gareth Southgate viene de quedar en el cuarto puesto el Mundial de Rusia 2018 y de ser subcampeones de Europa en la última edición disputada en el año 2021. Además, cuentan con un equilibrio justo entre jugadores experimentados y jóvenes. Tienen nombres como Harry Kane, Raheem Sterling o John Stones, todos futbolistas de renombre. Apuntarán a volver a estar entre los cuatro mejores.
Gran parte de este plantel de Inglaterra ya tiene la experiencia del cuarto puesto en Rusia 2018. En cuanto a la edad llegan en el momento justo para dar un gran golpe. Harry Kane tiene 29 años, Raheem Sterling tiene 27, John Stones 28 y el arquero Jordan Pickford también 28. A eso se suman jugadores jóvenes como Jude Bellingham de 19 años y Phil Foden de 22. En su última convocatoria, 22 de los 23 jugadores convocados jugaban en la Premier League. La única excepción fue Bellingham que se desempeña en el Borussia Dortmund.
Inglaterra pretende llegar lejos en el próximo Mundial de Qatar 2022. Y Sterling será una de sus puntas de lanza.
Todos los partidos del Grupo B (*):
Fecha 1:
Inglaterra vs. Irán, lunes 21 de noviembre, a las 16, estadio Internacional Khalifa.
Estados Unidos vs. Gales, lunes 21 de noviembre, a las 22, estadio Ahmad Bin Ali.
Fecha 2:
Irán vs. Gales, viernes 25 de noviembre, a las 13, estadio Ahmad Bin Ali.
Inglaterra vs. Estados Unidos, viernes 25 de noviembre, a las 22, estadio Al Bayt.
Fecha 3:
Inglaterra vs. Gales, martes 29 de noviembre, a las 22, estadio Ahmad Bin Ali.
Irán vs. Estados Unidos, martes 29 de noviembre, a las 22, estadio Al Thumama.
(*) Todos los partidos se muestran en hora local. En España es -1, en Argentina y Chile -6, en Colombia -7 y en México -8.