Ya sin las botas puestas, David Beckham continúa siendo una estrella en el planeta fútbol. El exjugador inglés marcó un antes y un después en sus años de más alto nivel, pero hoy es una figura fuera de las canchas.
Su actividad publicitaria mantiene su nombre en boca de todos con su rol de modelo, que ya aplicaba durante su carrera. Pero también es mencionado recurrentemente por ser el propietario y dueño de Inter Miami, su ambicioso proyecto en la Major League Soccer.
Los millones que embolsó a lo largo de su vida hoy le permiten tener un garaje envidiable para muchos. Bentley, McLaren, Ferrari, Maserati, Range Rover y Rolls-Royce son algunas de las lujosas marcas que posee, aunque su primer coche es inolvidable.
Curiosamente, a pesar de tratarse de un futbolista profesional en la Premier League, se lo compró usado a Ryan Giggs. El galés, por su parte, ya lo había comprado de segunda mano, aunque terminó siendo de gran compañía para ambas leyendas de Manchester United.
Se trata de un Ford Escort por el cual Beckham le pagó alrededor de 6 mil libras a su compañero de equipo. Esta máquina fue la que condujo el exjugador de Real Madrid y PSG, entre otros, antes de convertirse en una estrella mundial por su particular estilo.