Julián Álvarez y Alejandro Garnacho, de por sí, dan que hablar tanto en Inglaterra como en la Argentina por sus constantes destacadas apariciones con sus respectivos equipos de Manchester. Pero en las últimas horas tomaron aún mayor relevancia en los principales medios deportivos británicos al quedar inmersos en la polémica que se desató en la Premier League a raíz de los fallos arbitrales de las primeras jornadas.
Resulta que el último fin de semana el equipo que comanda Pep Guardiola fue favorecido con un lanzamiento desde el punto del penal contra el Sheffield United (Erling Haaland lo terminó errando estrellando su remate en uno de los postes) en el duelo que se llevó a cabo en el Bramall Lane correspondiente a la tercera fecha del torneo local.
La jugada que permitió el tiro libre desde los 12 pasos vino de un intento de asistencia de Julián Álvarez en el área del Sheffield que impactó en la mano del zaguero central John Egan cuando iban 36 minutos del primer tiempo. Ante la secuencia, el juez del partido, Jarred Gillett, no dudó en marcar la pena máxima para el Manchester City que, si bien malogró esa oportunidad, terminó ganando el juego por un marcador de 2 a 1.
Tal situación generó primero la reacción de los hinchas del Manchester United y después de los programas deportivos que enseguida recordaron el penal que el árbitro Michael Olive no le otorgó a Alejandro Garnacho, también por una mano en el área, en el debut de la Premier League 2023/2024 contra el Tottenham Hotspur. De hecho, a quien le rebota el balón fue a Cristian Romero, el otro integrante de la Selección Argentina involucrado en la controversia.
El tema tomó semejante repercusión en los medios del Reino Unido que hasta el propio Roberto Garnacho, hermano del delantero, se agarró de la discusión para quejarse a través de su cuenta de Twitter, a la postre, por el penal que sí le dieron a Julián y no a Alejandro: “Parece que el Manchester United tiene reglas diferentes”, escribió.