Con el objetivo de volver a los primeros puestos en LaLiga y en la Champions League, Barcelona está transitando un mercado de pases exitoso. El culé consiguió el empuje económico para olvidar, de momento, la crisis financiera y completó enormes incorporaciones.
Robert Lewandowski, Raphinha, Andreas Christensen, Franck Kessié y Pablo Torre ya visten la camiseta blaugrana. Sin embargo, a pesar de que Xavi Hernández está feliz con las caras nuevas, el Barça no se conforma y sigue buceando en la ventana de transferencias.
Unas de las prioridades pendientes para el culé en este verano es la de fichar a un lateral izquierdo. Con Jordi Alba como único jugador en aquella posición, el club catalán intenta sumar a un futbolista de calidad para que pueda competir con el referente.
Marcos Alonso continúa siendo el máximo deseo de la dirigencia para ocupar aquel sector de la cancha. Las negociaciones con Chelsea no avanzaron como se esperaban y es por eso que comenzaron a mirar alternativas, entre las que apareció Sergio Reguilón en las últimas semanas.
Tottenham está dispuesto a desprenderse de él, pero, según publicó Sport este miércoles, el Barça lo descartó por su público fanatismo por Real Madrid. El lateral español no oculta su amor por el Merengue y la directiva decidió no avanzar por una posible contratación.