Fue el 31 de enero, último día del marcado de fichajes en Europa, cuando Everton, el tradicional equipo azul de Liverpool anunció el arribo de Frank Lampard como el reemplazante de Rafael Benítez, entrenador español que había dejado a la institución en una complicada situación.
Se puede decir que el exfutbolista, con glorioso paso por Chelsea y en general por el fútbol inglés, ‘agarró una papa caliente’, debido a que su principal labor era salvar al equipo de Liverpool de perder la categoría y jugar la temporada que viene en la Championship.
Hasta mitad de temporada, el experimentado director técnico ibérico había dejado números francamente preocupantes y que tenían en alerta tanto a las directivas, como a los aficionados, que en la jornada de jueves 19 de mayo, festejaron a rabiar por salvar la categoría.
Y es que la relación de Benítez con los hinchas fue de cero comunión, en su trayecto como entrenador, fueron pocos los momentos de alegría que dio el timonel. De hecho, tuvo más contradictores al momento que deicidio prescindir de los servicios del volante colombiano, James Rodríguez, quien contaba con gran acogida en los fanáticos.
Pero Benítez, al paso de 20 partidos, solamente sumó 19 puntos, una cifra de no creer para un hombre que llegó a la institución con la premisa de poner al equipo a pelear por los cupos a torneoseuropeos; cosa que no sucedió y, por otra parte, resultaron ‘peleando’ por no descender.
Los números de Frank Lampard fueron algo mejores, no los más destacados, pero ganó partidos impensados en el calendario y eso fue suficiente para ir marcando el camino de la salvación. Tras 17 partidos, el exfutbolista y ahora técnico sumó un total de 20 puntos; cifras mejores que las de su antecesor.
Sus sorpresivos triunfos se dieron ante rivales de peso como Manchester United, al cual vencieron 1-0 en Goodinson Park; 2-1 a Leicester y también de local a Chelsea, el club del cual es ídolo Lampard. Una tremenda historia la del ex mediocampista.