Old Trafford se alista para una nueva era, para un proyecto novedosos y para una gran decisión donde cada detalle cuenta a la hora de elegir un camino. Desde el Reino Unida reportan como la venta del Manchester United vuelve a ser noticia y que se hacen cuentas para evitar que esta saque a los hombres de Erik Ten Hag de las próximas UEFA Champions League.
Los Glazer parecen más abiertos que nunca para emprender nuevos rumbos (no por menos de 6.000 millones de libras) lejos de una entidad que de la mano del entrenador neerlandés empieza a ver la luz nuevamente. Terceros con 50 unidades tras 29 jornadas de Premier League, los Red Devils apuntan a conseguir los méritos deportivos para meterse en Europa la próxima temporada. Eso sí, una cosa es el césped y otra los despachos.
The Sun es quien comenta sobre las ofertas han llegado a los seis hermanos norteamericanos y que se componen por Sir Jim Ratcliffe e igualmente por Sheikh Jassim bin Hamad Al-Thani, miembro de la familia real de Qatar y por supuesto, cercano a los cargos que desde Doha manejan PSG. El problema eso sí, no llega solo desde Oriente Medio sino también por quien ostenta uno de los mayores imperio económico del Reino Unido.
UEFA quiere ser aliado
El medio informa que Al-Thani ha podido superar los primeros filtros (quedan varios) para evitar ser relacionado con PSG y por ende, chocar de lleno con las normas de Nyon a la hora de ver dos equipos que compitan en el mismo torneo europeo siendo propiedad del mismo dueño. Dicho escenario de momento no se da Sir Jim Ratcliffe, quien recordemos es el máximo poseedor de las acciones de un Niza que busca plazas europeas. Son séptimos con 44 unidades, a 11 de Europa League y 13 de la Champions. A corto plazo hay calma pero en largo es una posibilidad.
En The Sun hablan que si el británico consigue a los Red Devils, se verá obligado a vender en Francia para evitar que dicho contexto se de en cualquier torneo de la UEFA. Desde Nyon vienen trabajando para aprobar la multipropiedad del fútbol europeo con una serie de reformas que habrá que ver si se consiguen aplicar antes de que Manchester United sea vendido. Los Red Devils aguardan y cruzan los dedos para evitar un contexto donde su nuevo dueño tenga que elegir.