La fallida reunión de Agustín Rossi y Boca fue el tema central del martes. No solo no llegaron a un acuerdo para extender el contrato del arquero, sino que su representante y Jorge Amor Ameal se tiraron dardos públicos en las horas posteriores. Todo indica que será imposible seguir negociando.
Lo que sí despertó incertidumbre es ver qué va a pasar con el 1 de acá en adelante, ya que le queda un año de vínculo con el club pero se hablaba de la chance de que Hugo Ibarra lo cuelgue. Hay casos de sobra: Pavón no jugó más, Salvio terminó en el banco, Pol Fernández fue apartado por Russo y otros como Buffarini jugaron hasta el último día. Todas las miradas estaban puestas en el DT para lo inmediato.
Lo cierto es que, para empezar la práctica, el Negro definió que Rossi se entrene a la par de sus compañeros en La Bombonera. El ex-Estudiantes realiza todos los trabajos con normalidad y hace sus respectivas tareas junto a Fernando Gayoso y el resto de los arqueros.

Rossi entrena junto al grupo. (Foto: Boca)
Ahora solo queda esperar a ver qué decide Ibarra pensando en el sábado ante Platense, ya que existe la posibilidad de que sea Javier García quien se pare bajo los tres palos. En teoría, este jueves saldrá la lista de concentrados para saber la verdad. “Mi impresión es que no juega más”, dijo ayer Miguel González, el representante.
+ A qué se expone Boca con o sin Rossi
La última aparición del 1 en La Bombonera contó con una importante ovación de gran parte de los hinchas, algo que puede repetirse -y pesar más- luego de estos hechos de público conocimiento. Si el 1 no juega, la historia podría ser diferente, pero el “malestar” por esta negociación puede quedar en segundo plano.







