Este martes y a los 37 años, una dura noticia golpeó a los amantes del buen fútbol y sobre todo, a los hinchas de Universidad de Chile, luego que Gustavo Rubén Lorenzetti anunciase el fin de su carrera como profesional.
Si bien, 17 años de su vida en el fútbol los experimentó en nuestro país de los cuales, siete años y medio estuvo en la U siendo sus mejores momentos y como él mismo señaló en la publicación del anuncio, “aunque no soy formado en el club la siento como mi casa, me hicieron sentir parte de una familia”, reconociendo el buen pasar por los estudiantiles, ganando ocho títulos, entre ellos la Copa Sudamericana.
Sin embargo, más allá del Lorenzetti futbolista, queda en la retina lo gran persona que es y lo mucho que es querido por su entorno y alrededores. Bolavip Chile conversó con su ex representente, Washington Castro, quien recordó momentos del Duende y lo valorable que es como ser humano.
“Viví comosas muy lindas con él. Aparte de ser tremendo jugador, una gran persona, humilde, respetuoso, familiero. Su papá Rubén, venía siempre a verlo junto a su mamá. Y luego, con su señora, formaron una familia hermosa”, comentó Castro.
De todas maneras, no todo fue color de rosa en la vida de Lorenzetti con la U. Como el propio jugador narró en el Libro 2011, La historia de un equipo rebelde, el técnico Jorge Sampaoli no quería al rosarino, pero semanas más tarde reconoció el error. Castro contó que incluso, la negocación casi se cae.
“Cuando fue lo de la U, pasó algo especial. Los dirigentes sí querían a Lorenzetti, pero futbolísticamente en ese momento Sampaoli no lo quería. No estaba convencido y Sabino Aguad y los dirigentes, apostaron por Gustavo. Luego se ganó la confianza del cuerpo técnico, del club y de los hinchas. Pero nos costó, así me lo manifestaron y estuvo cerca de caerse la negociación”, recordó el agente.
Además, reveló lo que le dijo en un diálogo que sostuvo con el casildense sobre el pitufo. “Solo una vez hablé con Sampaoli y decirle un poco lo que era Gustavo, lo que contagiaba, lo quemetía, lo que entrenaba. Yo le dije a los dirigentes, ‘Gustavo se pone la camiseta de la U y no se la saca más’, porque estaba con toda el hambre de pasar a un equipo grande y ahora adora a la U. Lo que vivió ahí, quiere muchísimo al club”, apuntó Castro.
Finalmente, solo tuvo palabras de agradecimiento para quien compartió mucho tiempo con él quien fuese su representado, “agradecerle nomás a él, viví lindos años con Gustavo. Gran persona y un gran jugador”, concluyó Washington Castro.