Sportsmanship. Así se define en inglés a las actitudes deportivas por excelencia. Esas que engalanan y muestran que no todo es el ganar, ganar, ganar ni hacerlo a toda costa. En ese orden se inscribe lo que hizo la patinadora estadounidense Brittany Bowe, tras decidir regalarle su plaza olímpica a su compañera Erin Jackson. Amigas desde la infancia, Bowe y Jackson crecieron juntas dentro y fuera de una pista de hielo.

Ambas deportistas forman parte del equipo de Estados Unidos que competirá en los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 (del 4 al 20 de febrero próximo). Ambas disputaban una plaza en la prueba de patinaje de velocidad de 500 metros. Hasta allí, Jackson era (es) la número 1 indiscutible. Pero una desatención, un error puede dejarte afuera. De todo. Ese fue su caso, al sufrir una caída que la dejó tercera y sin chances de lograr el boleto para los Juegos Olímpicos. Afligida, Jackson estuvo por unos minutos fuera de Pekín. Fueron unos minutos, claro. Porque, sin dudarlo, Bowe le cedió inmediatamente su plaza a su amiga.

Semejante hecho, destacable en tiempos de altísima competencia, el equipo olímpico de Estados Unidos destacó la acción de Bowe. “Erin se ganó el derecho de formar parte del equipo y de competir en los 500 metros. Es la número uno del mundo y nadie merece más que ella la oportunidad de regresar a casa con una medalla para el Team USA”, explicó Bowe, actual campeona de 1000 metros y plusmarquista mundial. Y añadió: “Después de la caída y sin que esto hubiera terminado, sabía que en caso de tener que tomar una decisión ella podría tener mi lugar”.

La cesión de Bowe, no la deja sin cita olímpica. De hecho, antes de la carrera de 500 metros, la estadounidense ya sabía que iría a la capital china en las pruebas de 1000 y 1500 metros, distancias en las que se especializa. “Es el espíritu de los Juegos Olímpicos. Se trata de ser un gran compañero, esto es el Team USA, es más grande que yo. Erin tendrá chance de traer una medalla, ojalá de oro; es un honor darle esa oportunidad porque se la merece”, contó Bowe a NBC.

Por su parte, Erin Jackson, dijo: “Es difícil ponerlo en palabras. Estoy más que agradecida y solo estoy muy feliz. Crecí con Brittany, la conozco de casi toda la vida y sé la increíble persona que es. Siempre ha estado para mí, apoyándome, es una gran mentora y alguien con quien puedo hablar cuando necesito una amiga o un consejo. Es una gran amistad y estoy muy agradecida”. La patinadora, de esta manera, se aseguró asistir a sus segundos Juegos Olímpicos. “Entré en las Pruebas Olímpicas de Estados Unidos como la número 1 en el ranking de la temporada de la Copa del Mundo para la distancia de 500 metros. Casi me caigo en la carrera de clasificación y terminé en tercer lugar y me quedé a un punto de la clasificación olímpica. Brittany, que ganó la carrera, declinó su lugar en los 500 metros para abrirme un espacio en el equipo. (Ella seguirá compitiendo en sus otras dos distancias)”, fue la explicación concreta que Jackson escribió en sus redes sociales.