En junio de 1997 el mundo de “Harry Potter” apareció en escena y eclipsó tanto a grandes como chicos. Desde ese día, el mago precoz se ganó el corazón de millones de personas alrededor de todo el mundo. Y con él, claro, también su creadora Joanne Rowling, más conocida bajo los seudónimos J. K. Rowling.
A partir de 2005, el mundo mágico tuvo en el quidditch, el deporte aéreo entre escobas, arcos y varias pelotas que se practicaba en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, en una realidad más allá de los libros y su correlato en películas.
El paso de la creatividad al mundo real sucedió cuando dos estudiantes del Middlebury College comenzaron a jugarlo en su campus. El juego en la vida real es una mezcla de rugby y el quemado, entre otros, y cuenta con aros por los que los jugadores deben pasar las pelotas. Los jugadores deben ir montados en palos de escoba durante todo el partido.
de J.K. Rowling, la creadora de la zaga “Harry Potter” (Getty)
Pero, la sucesión de declaraciones contra los derechos de las personas transgénero expuso, desde 2019, una parte de J. K. Rowling quedó expuesta en las redes sociales y recibió una catarata de repudios que, por caso, llevaron a Daniel Radcliffe y Emma Watson a manifestar públicamente su apoyo hacia las personas trans.
Su aparente punto de vista transfóbico llevó a la US Quadball y la Major League Quadball, los dos organismos que rigen este deporte en Estados Unidos, a cambiar el nombre del quidditch por quadball. Este cambio entrará en vigor el próximo verano y la Asociación Internacional de Quidditch tiene previsto adoptar también el nuevo nombre.
Sin embargo, no se trata sólo de las declaraciones antitransgéner de Rowling, sino que hay otro motivo comercial dado que la marca “quidditch” pertenece a Warner Bros. Ambas organizaciones denunciaron sus posiciones, afirmando que el deporte era “uno de los más progresistas del mundo en cuanto a la igualdad de género”, en referencia a una regla que exige a los equipos no tener más de cuatro jugadores del mismo género en el campo a la vez.
Por todo eso, en diciembre de 2021, los dirigentes del quidditch decidieron buscar un nombre nuevo para el deporte a través de una encuesta entre los jugadores. Las opciones incluían quadraball, quidball y quadball, entre otras. “Este cambio de nombre supone un cambio de juego para nosotros, y queremos aprovecharlo al máximo”, dijeron los fundadores de la Major League Quadball en una carta abierta a los jugadores de un deporte que se extendió a 40 países y a casi 600 equipos.