Este martes, en la Súper Arena de Saitama, Naoya Inoue dejó salir su versión más monstruosa para acabar en menos de dos asaltos con un gran campeón como Nonito Donaire, arrebatándole el cinturón de peso gallo del CMB para añadirlo a los que ya ostentaba de la AMB y la FIB, quedando a tan solo uno del campeonato mundial indiscutible.

Apenas finalizado el combate, cuando todo era alegría para el japonés, indicó que precisamente conseguir ese cinturón de la OMB que actualmente pertenece al británico Paul Butler será su próximo objetivo, que no hay otra pelea que le interese de momento más que la que le ofrezca la oportunidad de sumarse a la lista que actualmente integran Canelo Álvarez, Josh Taylor, Jermell Charlo y Devin Haney.

Pero el martes no terminó del todo bien para Naoya Inoue, porque al regresar a su casa supo que mientras estaba peleando habían entrado a robarle, algo que se confirmó públicamente este miércoles. En ese robo, perdió al menos una docena de piezas de gran valor, como joyas y bolsos de lujo.

Poco después de enterarse que había sido robado por malhechores que evidentemente sabían que nadie estaría en la casa durante su pelea, el Monstruo Japonés expresó su disgusto en las redes sociales. "Que historia tan repugnante en un día de celebración. ¡Todos tengan cuidado", escribió en Twitter.