El mundo del boxeo acaba de tener un duro golpe luego de que Errol Spence Jr se haya bajado del combate ante Manny Pacquiao por los Títulos Mundiales Welter CMB y FIB. Sin embargo, no es la primera vez que a uno de los peleadores más importante del momento tiene un desprendimiento de retina que lo deja relegado por un tiempo del boxeo. 

El claro ejemplo de esto es Sugar Ray Leonard que tras combatir con Tommy Hearns tuvo que se intervenido quirúrgicamente para volver nuevamente a un ring. Debido a esto, repasamos los tres grandes campeones del mundo mexicano que tuvieron la misma lesión que el estadounidense y si pudieron o no regresar a combatir. 

Israel el Magnifico Vázquez tras la derrota con Rafael Márquez

Uno de los grandes peleadores de los últimos 20 años fue el Magnifico Vázquez que logró llevar adelante grandes combates por títulos mundiales en súper gallo. Sin embargo, en 2010, tras perder ante con Rafael Márquez, supo que tenía desprendimiento de retina y, tras varias cirugías, supo necesitaba un trasplante de córnea. Pero, por no realizar la intervención a tiempo, perdió su ojo izquierdo ya que no veía más y fue reemplazado por uno prótesis. 

Antonio Margarito tras perder con Manny Pacquiao

El Tornado de Tijuana siempre un peleador muy aguerrido, que da espectáculo y que siempre entraba en la polémica. Sin embargo, ante Manny Pacquiao no corrió la mejor de la suerte luego de haber perdido por punto. A su vez, tras su derrota con el filipino, el mexicano terminó con desprendimiento de retina y tuvo que ser intervenido. A pesar de esto, regresó al boxeo y enfrentó a Miguel Cotto, quien lo derrotó por la vía rápida en el noveno asalto. 

Abner Mares, un caso similar a Errol Spence Jr

El mexicano es un caso similar que le sucedió al estadounidense ya que luego de varios entrenamientos se dio cuenta que tenía mal su vista, a pesar de soportar los dolores en cada sparring cuando se preparaba para enfrentar a Gervonta Davis. “Sentí dolor, pero me aguanté y seguí entrenando. Regresé ese mismo viernes para otra sesión de sparring, me volvieron a pegar, es un deporte de contacto, y mi ojo se enrojeció muchísimo. Ese día y el sábado empecé a ver nublado y tuve visión borrosa. Le conté a mi esposa y me dijo que tenía que ir a revisarme, pero le dije que estaba bien. (Al lunes siguiente su doctor le dijo) 'No vas a poder pelear'", expresó Mares según lo informado por TUDN sobre lo que sucedió con su ojo derecho.