Se acabaron las palabras, y este martes por la noche Cruz Azul recibió a los Pumas de la UNAM en la cancha del Estadio Azteca, en el marco de la semifinal de vuelta de la Concacaf Champions League. Los Universitarios se hicieron fuertes, mantuvieron el cero, y obtuvieron el boleto para la gran final donde luchará por su cuarto título.

El encuentro de ida se había presentado a pura emoción, con los dirigidos por Andrés Lillini tomando el protagonismo en la mayor parte del encuentro y señalando dos goles por medio de un gran Juan Dinenno. Sin embargo, una recuperación final de los de Juan Reynoso y un gol de Christian Tabó decretando el 2-1 que le daba vida a los Celestes, quienes debían revertir el global.

 

La primera mitad mostró una posesión del balón repartida así como las ocasiones de peligro. La más clara fue un contraataque en el que Uriel Antuna asistió a Iván Morales y el atacante la tiró por arriba cuando quedó mano a mano con Alfredo Talavera. También hubo polémica por un gol anulado a Universidad tras un milimétrico fuera de juego de Leo López.

En la segunda parte, Pumas avisó con Juan Dinenno que casi convierte un golazo de vestidor al ángulo derecho. A los 63 minutos, Arturo Ortíz se fue expulsado después de jalar a Santiago Giménez cuando este se iba solo frente a la portería. Más tarde, el juez sancionó un penalti de Adrián Aldrete sobre Diogo, pero a instancias del VAR fue anulado. Ante la obligación y gracias al hombre de más, la Máquina se le vino a Universidad y Alfredo Talavera le propinó un atajadón a Adrián Aldrete.

Pumas apeló al cerrojo para aguantar el cero y a los contraataques para hacer correr el reloj. Mientras tanto, hizo correr el reloj y los locales fueron incapaces de vulnerar la portería visitante. PUMAS VUELVE A LA FINAL E IRÁ POR SU CUARTO TÍTULO DE CONCACHAMPIONS.