Sin tener una carrera descollante, Checo Pérez completó una buena labor en el Gran Premio de Italia, donde largó desde el 13° puesto para terminar en el sexto lugar. El piloto mexicano debió remontar debido a una penalización de diez lugares y también se sobrepuso a un problema en uno de sus neumáticos durante la jornada que tuvo lugar este domingo en Monza.

La remontada de Checo Pérez no pudo ser completa, en parte por culpa del Safety Car que ingresó sobre el cierre de la carrera, tras el problema en el monoplaza de Daniel Ricciardo. Red Bull celebró una nueva victoria de Max Verstappen, quien se encamina hacia el bicampeonato, pero también destacó la labor de Checo en medio de diversos obstáculos que tuvo a lo largo del fin de semana.

Helmut Marko, una de las personas con mayor influencia en Red Bull, suele ser muy crítico de Checo Pérez, pero esta vez reconoció su labor pese a los inconvenientes: "Tuvo un mal arranque y lo empujaron. No sé exactamente en cual curva, pero se dañó una goma muy fuerte y provocó vibraciones. Lo tuvimos que parar porque una parte quedó atrapada, por eso el cilindro de los frenos sacó tanto humo", explicó respecto al problema en el monoplaza.

"Después hizo una muy buena carrera. Sus tiempos estaban muy cerca de Max. El Safety Car fue desventajoso para él, si  no, hubiera pasado a Hamilton y probablemente al siguiente", comentó Helmut Marko en diálogo con el canal austríaco ORF.

La vuelta rápido ilusionó a Red Bull

Por otro lado, Marko contó cómo vivió las últimas vueltas, en donde Checo giró rápido, a tal punto de que se quedó con el punto extra por récord de vuelta: "Queríamos estar preparados para el spring final. Vimos con qué velocidad venía rebasando y una idea fue naturalmente la vuelta rápida, que hasta ese momento tenía Leclerc, y el punto se lo queríamos quitar. Cada cosa que planeamos se realiza, lo cual es muy satisfactorio", indicó el asesor de Red Bull.