El futbol mexicano vivió este sábado la que podría ser la tarde más negra de su historia. El partido entre Querétaro y Atlas en el Estadio Corregidora entregó imágenes fuertes tanto dentro como fuera de sus instalaciones. De momento, las versiones oficiales apuntan a solamente 22 heridos, dos de ellos de gravedad, lo que resulta llamativo dadas las imagenes difundidas en redes sociales.

Lo visto hoy en la cancha de Gallos Blancos fue el peor de los capítulos en una historia de encontronazos entre las barras de ambos clubes que llevaron a este duelo a ser considerado “de alto riesgo” por los antecedentes registrados en más de un partido donde la violencia apareció fuertemente.

Desde lo deportivo, Atlas y Querétaro nunca fueron instituciones con rivalidad en la cancha; sin embargo, la animadversión entre sus seguidores tuvo un parteaguas en el torneo Clausura 2007. Gallos Blancos llegaba a la última jornada con la necesidad de un resultado positivo para tratar de mantener la categoría.

Miles de hinchas hicieron el viaje desde Querétaro a Guadalajara para apoyar a su escuadra, muchos de ellos de la Resistencia Albiazul, barra del equipo, la cual al llegar al Coloso de la Calzada Independencia, tuvo enfrentamientos con la Barra 51 de Atlas antes de ingresar al inmueble, lo que dejó un primer precedente.

Una vez terminado el partido en el que La Academia ganó 2-0 y le dio la puntilla a Querétaro para mandarlo a la entonces Primera A, los ánimos se volvieron a encender, por lo que nuevos choques entre ambos grupos de animación se presentaron en la Calzada Independencia antes del regreso de la gente de Gallos.

PRIMER CHOQUE EN EL CORREGIDORA

Lo sucedido en el Estadio Jalisco fue nada más el detonante para lo que más adelante vendría. El descenso de Querétaro sirvió de burla para la gente de Atlas, que en una de sus canciones les echaba en cara el hecho al mencionar que “recuerda Gallos por mí no estás en Primera…”, letra que caló hondo en el orgullo queretano.

Para el torneo Bicentenario 2010, a los Rojinegros les tocaba visitar el Corregidora. Las advertencias de lo que podía suceder estaban dadas desde días antes al partido, principalmente porque los hinchas de Atlas anunciaban un viaje en gran número a Querétaro, lo que puso alerta a las autoridades.

El combate comenzó entre la Barra 51 y elementos de seguridad del estadio. Después de eso, desde una de las cabeceras del estadio, integrantes de la Resistencia Albiazul empezaron a acercarse a la zona ocupada por los visitantes, donde solamente estaban separados por una reja que al poco tiempo derribaron.

Los enfrentamientos entre gente de Gallos y Atlas tienen antecedentes. (Foto: JAM Media)

Los enfrentamientos entre gente de Gallos y Atlas tienen antecedentes. (Foto: JAM Media)

Después de eso, las cosas se salieron de control y en la parte alta de La Corregidora el intercambio de golpes duró por algunos minutos sin que las autoridades lo pudieran controlar. Al final, heridos, detenidos y un nuevo antecedente para poner foco en un encuentro que fuera de la cancha ya no podía pasar inadvertido.

INCIDENTES AISLADOS

Con los focos rojos encendidos cada que Atlas y Querétaro se tenían que ver las caras, los dispositivos de seguridad se incrementaron, sobre todo en el Estadio Corregidora. Las autoridades lograron controlar de cierta forma a la barra visitante y encapsular a la local, por lo que los altercados se daban entre las barras y los policías, pero dentro de todo, consiguieron evitar un nuevo combate entre las dos parcialidades.

CAOS EN QUERÉTARO

La tarde de este sábado 5 de marzo, la violencia alcanzó niveles nunca antes vistos en el futbol mexicano. No hubo sector del estadio de Querétaro en el que se respirara tranquilidad y para muestra, las imágenes de gente de Gallos Blancos golpeando indiscriminadamente a su contraparte atilista en las tribunas, cancha y accesos al Corregidora.

Fin de semana negro para el futbol mexicano. Querétaro y Atlas nos volvieron a regalar imágenes que nadie quiere ver.