El delantero se mostró muy enojado con la dirigencia de Vélez. "Quise venir a dar una mano y buscaron hacer negocio", expresó el exjugador del Real Salt Lake.


Parecía que iba a ser refuerzo de Vélez pero finalmente todo quedó en la nada. No sólo eso. El Burrito Martínez y su relación con la dirigencia del elenco del Fortín terminó bastante mal luego de la negociación para que el delantero vuelva al club donde mostró su mejor versión.

"Ya me bajé los pantalones en la negociación, no sé qué más quieren", expresó Juan Manuel Martínez, quien dejó el Real Salt Lake y que anunció que físicamente está pasando su mejor momento.

Los negocios son para ambas partes

"Es mentira que a Vélez le haya pedido u$s 600.000 por seis meses como dijeron. Habíamos arreglado u$s 35.000 brutos mensuales y una cláusula de rescisión a costo cero porque yo les avisé que pretendía irme en junio. De hecho el contrato se hacía por 18 meses y no por seis solamente por cuestiones de calendario. Pero cuando me mandaron el contrato me desayuné que le habían puesto una cláusula de rescisión de u$s 2.000.000 netos a pagar en el momento. Entonces les mandé una contraoferta con un sueldo acorde a esa cláusula. Los negocios son para ambas partes: puede que tenga cara de boludo pero no lo soy", dijo el Burrito en diálogo con la gente de TyC Sports.

Y siguió: "Vélez hoy no es vidriera para nadie. Quise venir a dar una mano y buscaron hacer negocio". Re caliente.