Zack Wheeler fue el primer gran nombre de la temporada muerta en conseguir un nuevo hogar, manteniéndose en el Este de la Liga Nacional, pero cambiando de acera para firmar con los Philadelphia Phillies con un contrato de 5 años y 118 millones de dólares

Era bien sabido que Wheeler no quería seguir viviendo en New York, por lo que Yankees y sus Mets habrían quedado descartados inicialmente. Sin embargo, no se había contemplado la posibilidad de que firmara tan rápidamente con otro equipo.

Los Phillies contrataron recientemente a Joe Girardi para continuar su proyecto deportivo centrado alrededor de Bryce Harper, motivos suficientes para ilusionar a cualquier lanzador de calidad.

Sin embargo, Marc Craig de The Athletic reportó que la gota que derramó el vaso en favor de los Phillies fue la cercanía a New Jersey, ciudad natal de la esposa de Wheeler. De esta forma, podría seguir cerca de casa sin tener que estar en New York.

Wheeler viene de una enorme campaña con el equipo de Queens, pero ahora se convertirá en persona non grata para la franquicia, teniendo en cuenta que los cambió nada más y nada menos que por un rival divisional.