Se abrió la puerta del avión que trasladaba a La Academia desde Córdoba y se vivieron momentos de enorme tensión que fueron grabados por un teléfono celular.

Racing había contratado dos vuelos con una empresa con la que ya había trabajado para volver rápido de Córdoba, tras el partido con Belgrano, en donde los de Avellaneda perdieron por 2-0.

En uno de los vuelos, en donde viajaban los auxiliares y algunos jugadores, hubo un problema grande y se vivieron momentos de enorme tensión cuando, poco después del despegue, se abrió una puerta de manera inesperada.

Se escucharon los gritos. Las señales de advertencias. El desesperado "pará, pará". El recuerdo de la tragedia del Chapecoense rondó la mente de los tripulantes con esa sensación de que todo se podía terminar en un abrir y cerrar de ojos. Por suerte fue solo un susto.