Todos recordamos la grandeza y talento de Barry Bonds sobre el plato cuando estaba activo en la MLB. De seguro sus batazos de vuelta completa vistiendo la camiseta de San Francisco Giants cautivó a más de un fanático y seguidor del beisbol.

Su fuerza era tan abrupta que a lo largo de su trayectoria logró mandar a la grada, y muchas veces a la Bahía de San Francisco nada más y nada menos que 762 pelotas, pero ese récord ya no sería el mayor de todos los tiempos gracias a los cambios que realizaron las Grandes Ligas.

Hace poco, la Negro Leagues fue reconocida por parte de la MLB como una Grandes Ligas, lo que incorporaría los registros de los peloteros que participaron allí como parte de las cifras y estadísticas oficiales.

 

Josh Gibson, el nuevo rey del homerun

Por ello, Josh Gibson sería, en teoría, el nuevo mandamás de los cuadrangulares, dado que despachó entre 800 y 1000 bambinazos (casi nada) según varios historiadores. Ahora, el detalle radica en que dichos registros están incompletos y solo se le han contabilizado 224 vuelacercas cuando en realidad ejecutó muchísimos más.

Gibson hizo acto de presencia en las Ligas Negras sin nunca tener la oportunidad de jugar en Grandes Ligas. Sin embargo, lo que es totalmente seguro es su promedio al bate, pues registró average astronómico de .451 en 1933, dejando atrás a Ted Williams y sus .406 en 1941 con Boston Red Sox.