Donde quiera que va, LeBron James es un tipo que genera muchas emociones. Ya sea para pedirle un autógrafo, una foto o incluso un insulto, su presencia y su llegada nunca pasan desapercibidas.

Es por eso que cada vez que James va a alguna ciudad o pueblo que no frecuenta, los locales se conmocionan y aglomeran tratando de ver al 4 veces MVP de la NBA frente a frente y como a cualquier mortal.

Y, finalmente, unos niños que esperaron durante 5 años a las afueras del hotel donde James se hospeda cuando visita New Orleans, tuvieron el placer de tomarse una foto con su ídolo más grande.

“Hemos estado viniendo durante cinco años para poder tomar esta foto”, declaró el padre de los jovencitos, claramente emocionados por poder compartir un par de segundos con la estrella de los Lakers.

James es un conocido filántropo que siempre trata de mantenerse cerca de sus fanáticos y, a pesar de que sus detractores no lo reconozcan, ha abogado constantemente por ser un ejemplo positivo para los niños.

¡Valió la pena la espera!