En la previa, el choque entre Borussia Dortmund y PSG prometía muchísimo. Los primeros 65 minutos fueron un fraude total.
Casi no hubo llegadas y, mucho menos, tiros al arco. Parecía que iba a quedar todo en un 0 a 0 clavado entre ambos.
Pero apareció el niño maravilla para abrir el marcador. Erling Haaland aprovechó un rebote corto de Keylor Navas para empujarla abajo del arco.
Poco duraron los festejos en Alemania. Tras una gran jugada de Kylian Mbappé, Neymar la terminó empujando abajo del arco para empatar el resultado.
Cuando todo cerraba en empate, volvió aparecer la joya europea. Haaland se acomodó y le rompió el arco a los parisinos para poner el 2 a 1 final.
Resultado ambiguo para ambos, los alemanes no pudieron mantener el cero en su arco. Los dirigidos por Tuchel se van conformes y saben que ganando 1 a 0 pasan a cuartos.