A fines de abril del año pasado, cuando Kylian Mbappé ya había anunciado que no renovaría su contrato con el París Saint-Germain (semanas después, en conjunto con el Real Madrid, anunciaría en redes sociales su traspaso a la Casa Blanca), a Luis Enrique le consultaron por la decisión del que por entonces era la estrella de su equipo.
Fue días después de la eliminación en la Semifinal de la Champions League con el Borussia Dortmund, por lo que el clima en el Parque de los Príncipes, en donde están obsesionados hace décadas con llegar a ser campeones de Europa, no era el mejor ni mucho menos. Porque encima de que habían quedado, una vez más, en la orilla de la Orejona, se les estaba yendo la máxima figura del deporte francés de los últimos 10 años.
Por lo tanto, ante los resultados de ese momento, sumado a la despedida de Mbappé, la prensa local no se mostraba nada optimista con el futuro cercano del PSG. Todo lo contrario a lo que transmitía Luis Enrique, que con su típico tono desafiante, en conferencia de prensa, lanzó: “Estoy convencido de que la próxima temporada seremos mejores”.
Nadie le creyó por entonces. Incluso la frase fue motivo de debate en los principales medios de Francia. Sin embargo, un poco más de un año después, el entrenador español demostró que tenía razón. El PSG, es campeón de la Ligue 1 y del Trofeo de Campeones de Francia al igual que el año pasado, pero a diferencia es finalista de la Champions League.
Además, en su camino sinuoso hacia el encuentro del 31 de mayo en el Allianz Arena de Munich se deshizo del Liverpool (vigente campeón de la Premier League), del Aston Villa y del Arsenal (escolta en la tabla de posiciones de la liga inglesa). En ese mismo sentido, vale recordar que se jugó la clasificación al Repechaje en la última fecha de la Fase de Liga ante el Manchester City, a quien derrotó 4 a 2.
¿Y qué fue de la vida de Kylian Mbappé al separarse del PSG?
Si bien en su primer partido con el Real Madrid obtuvo el título de la Supercopa de Europa ante la Atalanta, siendo el autor de uno de los goles del 2 a 0, y cuatro meses después alzó la Copa Intercontinental al vencer al Pachuca (estos dos, sus primeros títulos internacionales a nivel clubes), las derrotas en la final de la Supercopa de España y en la definición de la Copa del Rey con el Barcelona y la temprana eliminación en la Champions League, representan una temporada que está muy lejos de ser lo que seguramente soñaba.
