Atlético de Madrid festeja por partida doble. Es que en el aniversario 120 de su fundación, le ganó a Mallorca por 3-1 en un partido correspondiente a la jornada 31 de LaLiga de España. Rodrigo de Paul, Álvaro Morata y Yannick Carrasco marcaron para dar vuelta un resultado adverso por el gol de Matija Nastasic.
Buena actuación en líneas generales del equipo de Diego Pablo Simeone, que queda a dos puntos del segundo lugar de la tabla de posiciones, mientras que el equipo de Javier Aguirre se aleja de la posibilidad de pelear por algún puesto europeo y queda inmerso en mitad de tabla.
El primer tiempo tuvo a un Atleti protagonista, muy metido e intenso como pide siempre Cholo Simeone. La banda derecha fue la zona elegida para empezar a complicar a un conjunto mallorquín, que esperaba para salir de contraataque, aunque prácticamente no pudo tener situaciones de peligro.
Sin embargo, la falta de precisión en los metros finales para el local le costaría caro. Es que al minuto 20, Nastasic aprovechó una pelota cruzada, que pasa por toda el área chica y le queda servida para definir de cabeza. Grbic no tuvo nada que hacer y Mallorca pegó en el momento menos pensado. El ex Manchester City marcó su primer tanto en este equipo desde su llegada en el verano pasado.
El Metropolitano no creía lo que veía. Es que su equipo estaba siendo totalmente dominador con un Griezmann protagonista de cada ataque, con De Paul y Molina atacando por derecha, con algunos chispazos de Carrasco por izquierda, pero el gol no llegaba, más allá de generar peligro con algunos remates débiles o desviados. Sin embargo, Atlético logró golpear en dos momentos claves: primero, De Paul aprovechó una pelota al medio para marcar el empate al final del primer tiempo.
El argentino aprovechó una jugada por la derecha en donde la defensa no la puede sacar y Griezmann la volvió a meter al medio. No llegó Morata, pero sí el campeón del mundo para marcar gol e irse al entretiempo con un resultado más favorable. Pero, al inicio del segundo tiempo, volvió a pegar. Antes de los dos minutos, tras una buena jugada colectiva, Molina mandó un gran centro para un mejor cabezazo de Morata, que marcó el 2-1 y lo gritó con alma y vida.
El 2-1 reflejaba un poco mejor lo que fue el primer tiempo en donde los Colchoneros hicieron el desgaste y tuvieron mayor cantidad de chances de peligro. Para Mallorca fueron dos duros golpes a la moral, por lo que el Vasco Aguirre buscó apoyo y metió tanto a Muriqi como a Kang-in Lee, quienes amenazaron la valla de Grbic en ciertos momentos.
Simeone trató de responder reforzando el mediocampo con los ingresos de Barrios y Saúl, aunque el trámite del partido parecía que se le iba de las manos. Hasta que al minuto 77 de juego, de un córner en favor de Mallorca, la pelota sale a favor de un Griezmann, que asistió perfectamente a Carrasco para salir de contra. Se fue totalmente solo mano a mano ante Rajkovic. Un buen amague pisando el balón permitió una definición más tranquila para sentenciar el 3-1.
El gol ya liquidó prácticamente el partido en favor de un Atlético de Madrid, que vuelve al triunfo tras la derrota ante Barcelona y se ilusiona con pelear el segundo lugar. Es que la derrota de Real Madrid ante Girona le permite quedar a dos puntos de ser escolta del líder culé y pelear por el subcampeonato.