¿Qué pasa en el Camp Nou? ¿Por qué se van directivos? ¿Qué motiva a algunas manos derechas de Joan Laporta a marcharse en plena reconstrucción? Preguntas que quedan en el aire cuando se mira el presente de una entidad que piensa más allá del título de LaLiga que viene en camino, de la figura de Lionel Messi y que tiene como principal objetivo volver a calmar las aguas de los últimos dos años.

La salida de Mateu Alemany fue un huracán en toda regla, pero ni mucho menos el primero que se vive en una entidad donde ahora mismo se busca director de fútbol. Los rumores de una oferta inigualable del Aston Villa a nivel económico, de la mano con los que apuestan por una preocupación en relación con el mercado de fichajes y por supuesto, con el retorno de Lionel Andrés hasta el verano del 2025.

Pero no es ni mucho menos la primera vez que esto ocurre, sino más un síntoma de los retos que asume Joan Laporta desde que se quedase con la presidencia de un club en llamas que empieza a ver la luz a nivel deportivo. Se viene un verano movido y a corto plazo eso sí, todo pasa por encontrar el heredero de un Alemany que días atrás aseguraba que ya trabajaba pensando en el futuro.

Mateu Alemany, Ferrán Reverter y Jaume Giró: Getty

Laporta se queda solo

Para entender todo esto hay que devolvernos hasta la presentación de la candidatura del mandamás culé para llegar nuevamente a presidir un Barcelona que se dividía entre Laporta y Victor Font. Acompañado por Alemany para el área deportiva, por Ferrán Reverter como CEO de la parte ejecutiva y por Jaume Giró como presidente económico, Joan ganaba unas elecciones donde a día hoy no han seguido ninguno de estos nombres que componían su séquito.

Medios como AS repasan una lista de salidas que hablan de dimisiones a la hora de planificar el futuro de un club que debemos entender a corto plazo por cuestiones mucho más grandes que la figura de Messi, donde se hacen operaciones por cerca de 1.500 millones de euros alrededor del Camp Nou y donde se lucha contra una deuda sin precedentes en la ciudad condal. Algo ocurre en las altas esferas de una entidad que desde febrero del 2022 hasta mayo del 2023, se ha quedado sin director de fútbol, sin vicepresidente ejecutivo y sin su principal carta para recuperar la economía. ¿Qué pasa en Can Barça?