La fiscalía de Frankfurt confirmó este jueves que ha realizado requisas en la sede central de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) y en los domicilios de varios exfuncionarios por sospecha de malversación de fondos.
Se sospecha que la DFB pagó a una agencia de comunicación 360.000 euros por un contrato ficticio firmado por un exfuncionario, del que no se quiso revelar su identidad.
En las requisas en la sede central de la Federación Alemana de Fútbol y en los domicilios de varios exfuncionarios en Hesse, Baden Württenberg, Renania del Norte-Westfalia, Berlín y Bremen participaron un total de 70 agentes según el informe oficial.
Esta es la tercera vez en menos de dos años que la fiscalia interviene la DFB, en noviembre de 2021 ya había estado en la mira de las autoridades por sospecha de evasión de impuestos y habían sido confiscados documentos relacionados con contratos de patrocinios. En octubre de 2020, había habido requisas en los domicilios de varios funcionarios también por razones de impuestos en esa ocasión llegó a abrirse un sumario contra el actual presidente encargado Rainer Koch que finalmente fue archivado.
Todo esto pasa en medio de un proceso electora dentro de la Federación Alemana de Fútbol. Y debido a los tensos cruces políticos, algunos aficionados han dejado varios mensajes en las paredes de la DFB tras la noticia de las requisas.