París Saint Germain vive uno de los momentos más complicados del proyecto liderado por Qatar desde hace más de una década. La salida de Lionel Messi del Parque de los Príncipes, acompañada por la protesta de los Ultras a lo largo de las últimas 24 horas por una nueva temporada llena de decepciones, llevan al club a tomar decisiones de peso en cuanto a la seguridad de los futbolistas del equipo. La Pulga, Neymar y Marco Verratti, principal objetivo.
Pedidos de dimisión a la directiva, a Nasser Al Khelaifi, a Luis Campos, insultos contra Lionel Messi, contra el volante de la selección italiana y por supuesto a en las afueras de la residencia de Neymar. Así fueron las últimas 24 horas en un PSG que se desangra desde adentro y donde la paz apunta a llegar a corto plazo.
“Paris Saint-Germain condena en los términos más enérgicos las acciones intolerables e insultantes de un pequeño grupo de individuos, que tuvieron lugar el miércoles…Cualesquiera que sean las disputas, nada puede justificar tales actos. El Club da todo su apoyo a sus jugadores, a su directivo y a todos aquellos afectados por estos comportamientos vergonzosos”, fue el comunicado del club para atacar una situación que apunta a no haberse terminado anoche. Se vienen medidas.
Temor por la seguridad de la plantilla
L’Equipe es que confirma junto a la agencia AFP como la entidad presidida por Nasser Al-Khelaifi contratará seguridad privada de cara a proteger tanto la residencia de los futbolistas nombrados como el propio centro de entrenamiento del PSG hasta final de temporada. Los avisos en redes sociales del colectivo Ultras, detonante de todo: “Queremos repetir la acción todas las noches”.
Se viene un final de temporada más que complicado para este PSG que este fin de semana jugará como visitante ante Troyes y que volverá al Parque de los Príncipes el día 13 de mayo para medirse con Ajaccio. L’Equipe también habla de un operativo policial sin precedentes a corto plazo en la Ligue 1 para dicho encuentro. Proteger la integridad de Messi, Neymar y Verrati, tema de estado en París.