Diego Martínez tuvo un debut auspicioso y prometedor en Boca Juniors. En su primer partido como técnico del ‘Xeneize’, fue triunfo por 1-0 ante Gimnasia y Tiro de Salta en el Estadio Padre Martearena. El único gol del partido fue obra de Ezequiel Bullaude en la primera mitad. El amistoso dejó cosas positivas en el conjunto azul y oro.
Hubo mucha expectativa por ver al Boca de Martínez. Fue la primera prueba para el nuevo entrenador, quien ya pudo imponer ciertas cosas en su equipo, aunque el camino todavía es largo y resta por ver todavía ciertas piezas con las que aún no cuenta (los jugadores en la Selección Argentina Sub 23).
El examen fue aprobado y con muchos puntos a destacar, pero es cierto también que el rival cedió y también le permitió al ‘Xeneize’ tomar protagonismo. Por eso, se vieron muchas llegadas interesantes, bastantes futbolistas llegando al área y juego por banda. ¿Lo malo del debut de Diego Martínez? Los últimos minutos dejaron algunas dudas y la lesión de Marcos Rojo en el calentamiento.
El primer tiempo, lo mejor del Boca de Diego Martínez
El primer tiempo mostró a un Boca ambicioso y con facilidades para llegar hasta el fondo, así como también para conducir por el medio. Gimnasia y Tiro fue simplemente acompañante y hasta se sintió por momentos la diferencia física (el equipo salteño jugó ayer).
El cuadro azul y oro pegó rápido, ya que a los nueve minutos, abrió el marcador. Un buen pase por arriba de Saracchi lo puso a correr a Langoni, quien entró al área por izquierda y mandó un centro bajo y atrás. Lo encontró a Bullaude solo para que pueda definir de zurda al palo para el 1-0. Buen gol de Boca, tanto que hasta Diego Martínez aplaudió la jugada.
Habrá que ver si Bullaude termina siendo titular en este Boca, pero seguramente, es uno de los puntos que Diego Martínez estuvo trabajando desde su arribo. La jugada de Langoni haciendo diagonal y metiendo un centro atrás para la llegada de algún mediocampista. En Godoy Cruz, el autor del gol hacía este tipo de jugadas y acá se vio perfecto el porqué puede ser un jugador a aprovechar por el nuevo DT.
Durante el primer tiempo, hubo algunos jugadores que destacaron. Merentiel siempre fue importante como referencia de ataque, pero también bajó a armar juego, algo que se le suele reconocer. Y uno de los más sorprendentes fue Juan Ramírez, quien tuvo un buen primer tiempo en donde cuando la agarró por dentro generó y cuando no, se volcó bien por izquierda para ayudar a Saracchi.
Precisamente, Merentiel tuvo el 2-0 al minuto 35 y con el arco libre. Eludió bien al arquero Abadía y tuvo la oportunidad hasta de parar la pelota para definir, pero se apuró y la mandó afuera. La jugada previa había sido buena y pudo haber sido un golazo.
En los últimos minutos, producto de cierto cansancio por el primer partido del año, sumado a algún problema físico de Langoni, se vio lo peorcito de Boca. Gimnasia tuvo una jugada clara que Chiquito Romero respondió muy bien, a pesar de un offside previo.
En el segundo tiempo, Boca bajó, pero dejó una buena imagen
Para el segundo tiempo, se vieron varios cambios. El primero fue la salida de Langoni, con alguna molestia muscular, por Janson. Pero luego, entraron Anselmino, Blondel, Benedetto, Saralegui, Taborda y Fabra. Sorprendentemente, el público salteño recibió de buena manera al colombiano, pese a ser uno de los más resistidos.
El segundo tiempo no ofreció llegadas claras. Sí hubo otra actitud del local, sobre todo con algunas acciones individuales de Fabricio Rojas a pura potencia, más que por habilidad. Sin embargo, no hubo situaciones de peligro que compliquen a Romero.
Con la gran cantidad de cambios, Boca bajó el ritmo. En los últimos minutos, algunas imprecisiones y libertades en defensa dejaron cierta preocupación en el nuevo técnico. No obstante, eso no puso en cuestión el triunfo de Boca, el primero de la era Martínez.
