En el verano de 2018, Marcelo Gallardo trajo a su River a Juan Fernando Quintero proveniente de Independiente Medellín de Colombia. Al entrenador millonario lo había cautivado su participación cuando se enfrentaron los equipos entre sí en la Copa Libertadores 2017 y por su amplio repertorio en su corta carrera, ya que con solo 24 años, Juanfer ya había jugado más de 80 partidos en el fútbol europeo, pero que había regresado a su país siendo muy joven.

Un año después y con la Copa Libertadores de Madrid en el bolso, el Muñeco intentó hacer lo mismo, dado que su apuesta por el colombiano había sido más que fructífera. En este caso, el volante colombiano que aparecía en carpeta era Luis Díaz.

Desconocido por muchos en el fútbol argentino en aquel entonces, pero que Gallardo había sembrado su interés en él para reemplazar la baja de Gonzalo Martínez en 2019por su explosiva velocidad, pegada y juego que demostraba en Junior en la liga de Colombia, donde además era el goleador del torneo y ya era convocado a su Selección.

De hecho, River ofertó por él, pero no prosperó. Los de Núñez le ofrecieron a Junior 5 millones de dólares por el 70% del pase, pero Junior pretendía 10 millones por la totalidad del mismo. Así, seis meses después del interés del Millonario, Junior vendió a Díaz al Porto por poco más de 7 millones de euros.

Desde su arribo a Portugal, el volante izquierdo no paró de crecer tanto en el club como en su Selección -donde incluso la rompió en la última Copa América-ycon solo 24 años, se volvió el nuevo capricho de Jürgen Klopp para la delantera del Liverpool. Incluso, según informó el Diario británico The Sun, los de Merseyside ya tendrían una oferta en mente para quedarse con el colombiano.

Ni más ni menos que ¡72 millones de euros! es lo que estarían dispuestos a pagar por Díaz para que se convierta en jugador Red. Esto está sujeto a la continuidad de Mohamed Salah y Sadio Mané, quienes deben renovar su vínculo con el equipo en las próximas semanas. Una cosa está clara, el ojo de Gallardo siempre es fino, no por nadase interesó en un jugador con semejante proyección.