La máxima de que en la Copa Mundial de Fútbol se dan cita, cada cuatro años, los mejores futbolistas del planeta no siempre se cumple de manera categórica. La ausencia de Jan Oblak, al igual que la de Gianluigi Buffón, es una de esas excepciones a la regla.

Desde que arribó al Atlético Madrid, el portero esloveno trabajó para convertirse en uno de los mejores de la actualidad. Y el esfuerzo rindió sus frutos, porque no solo se convirtió en un hombre clave para Diego Simeone sino que además es ahora el arquero con mejor valor de mercado.

Cotizado en 70 millones de euros, Oblak supera en esta lista a Marc-André Ter Stegen y Thibaut Courtois, el segundo y el tercer mejor valorado respectivamente.

Sin embargo, al esloveno le quedó muy lejos el Mundial, porque su selección finalizó en la cuarta posición del Grupo F de las Eliminatorias mundialistas de la UEFA, en la zona que ganó Inglaterra con gran comodidad.