El excampeón mundial de peso súper mediano Anthony Dirrell llegó al MGM Grand Garden Arena de Las Vegas decidido a hacer ruido. En el combate co-estelar de la cartelera que tuvo como plato fuerte el combate entre Canelo Álvarez y Caleb Plant, noqueó en el cuarto asalto a Marcos Hernández para luego pedir que le den lugar nuevamente en las peleas de campeonato.
Incluso se atrevió a ir mucho más allá, porque amenazó con retirarse del boxeo si Saúl El Canelo Álvarez no le concede una pelea el año próximo. “Me retiraré. Sí, porque tengo 37 años. Si no puedo luchar por algo voy a hacerlo”, comenzó diciendo en la rueda de prensa posterior a su presentación.
Y agregó: “Estoy luchando por nada. No tengo nada que alcanzar. Creo que ser campeón mundial es el sueño de todo boxeador, especialmente ser indiscutible. Al menos déjenme luchar por eso y ver qué pasa. Pero si no puedo alcanzar a Canelo, me estoy volviendo demasiado mayor para esto”.
El gran problema para Anthony Dirrell a la hora de que le cumplan el deseo es que hoy por hoy no parece representar una atracción ni un gran desafío para el mexicano ni desde lo deportivo ni desde lo económico, habiendo otros nombres mucho mejor posicionados que quieren enfrentarlo, como Jermall Charlo, David Benavídez y Gennady Golovkin.
El estadounidense de 37 años había conquistado el título mundial del CMB en las 168 libras estando vacante, cuando venció a Avni Yildirim en febrero de 2019. Pero en su primera defensa, que tuvo lugar siete meses después, fue noqueado en el noveno asalto por David Benavídez.