Cada vez falta menos para el debut de Yuki Tsunoda con Red Bull Racing. Después de una larga espera, el nipón tendrá la oportunidad de abandonar el segundo equipo para convertirse en el compañero de Max Verstappen, una oportunidad que parecía habérsele esfumado cuando en Milton Keynes decidieron ascender a Liam Lawson luego de la salida de Checo Pérez.
No obstante, el propio Lawson estuvo muy por debajo de las expectativas y ahora será Tsunoda el encargado de obtener buenos resultados con Red Bull a partir del Gran Premio de Japón. Sin embargo, esta cita también servirá para ver si Liam puede volver a su nivel con Racing Bulls, ya que la primera conclusión para explicar su fracaso es que el RB21 es muy difícil de pilotar, algo que Yuki negó antes de su estreno.
En la plaza de bienvenida del edificio Aoyama junto a Ryo Michigami. En ese escenario, y ante la atenta mirada de cientos de aficionados, Tsunoda desmintió que el RB21 sea difícil de pilotar. “Fui capaz de conducirlo con normalidad de inmediato, así que en ese sentido siento que se adapta a mí. Pasé unos dos días en el simulador. De esa experiencia, no me pareció que el coche fuera tan difícil de conducir“.
Más adelante, Tsunoda completó al respecto: “Me dio la impresión de que el tren delantero es muy sensible, como se suele decir. Pero si me preguntas si me pareció difícil de manejar, no diría que me dio una sensación especialmente extraña“. Ahora, Yuki deberá defender sus palabras en la pista, pero no le teme a la presión y hasta sueña en grande para su primera carrera en Japón, su tierra natal.
Yuki Tsunoda espera hacer un podio en el Gran Premio de Japón
“No quiero crear demasiadas expectativas, pero para este Gran Premio de Japón quiero terminar en el podio“, manifestó Tsunoda de cara a su primera carrera con Red Bull en la Fórmula 1. Y completó: “Dicho esto, sé que no será fácil desde el principio. Mi prioridad es entender primero el coche y cómo se comporta en comparación con el VCARB (coche de Racing Bulls)”.