Cruz Azul cerró de gran manera su participación en la fase regular del Apertura 2022 de la Liga MX de gran manera, con triunfo 2-1 sobre Chivas de Guadalajara que le permitió alcanzar la séptima posición, ratificando también desde los números la notable mejoría que ha tenido el equipo tras la crisis inicial que dervió en la salida de Diego Aguirre del banquillo y la llegada de Raúl Gutiérrez.
Pero pensando en el repechaje clasificatorio a la Liguilla, en la Máquina ya se encendieron las alarmas debido a la lesión que a los 36 minutos de juego obligó a Ramiro Funes Mori, defensor argentino que llegó como refuerzo estelar para el presente torneo, a dejar el campo de juego y dar lugar al ingreso de Carlos Rotondi.
Previo a su salida, con el encuentro todavía igualado sin goles, el zaguero se dejó caer sobre el césped acusando una molestia muscular en su pierna derecha. Tras la evaluación del cuerpo médico, se decidió que no podía continuar y ya es la tercera vez que el Mellizo sufre una lesión desde su arribo a Cruz Azul.
Ramiro Funes Mori ya había dejado el campo de juego con anticipación, cuando el reloj también marcaba 36 minutos de juego, en la histórica y dolorosa goleada 7-0 sufrida ante Las Águilas del América. También ante Mazatlán, por la decimocuarta jornada, dejó el campo con molestias físicas a falta de poco más de 10 minutos para el final del encuentro.
La mala racha que atraviesa el defensor con las lesiones bien puede compararse con la de su hermano Rogelio, quien ha podido tener muy poco rodaje en este Apertura, poniendo incluso en riesgo la participación con la Selección de México en el Mundial de Qatar que hace unos meses atrás parecía tener casi asegurada.