A pesar de realizar un buen trabajo en la mayoría de los Mundiales, la Selección Mexicana no se puede quitar la espina de los Octavos de Final. Y eso se debe a nombres muy puntuales, como lo son Neymar (en 2018), Arjen Robben (en 2014) o Carlos Tévez (en 2010). Si retrocedemos un poco más, encontramos a un jugador que derrumbó por completo los sueños de un país con un gol de otro planeta: Maximiliano Rodríguez.
El equipo dirigido tácticamente por Ricardo La Volpe le hizo un partidazo a una Argentina repleta de figuras (Lionel Messi, Juan Román Riquelme, Hernán Crespo, Javier Mascherano, Carlos Tévez y Javier Saviola, entre otros) en Alemania 2006, pero cayó en tiempo extra por una obra de arte del (por ese entonces) elemento del Atlético de Madrid. Una volea espectacular de zurda (era derecho) que se le hizo imposible de alcanzar a Oswaldo Sánchez y destruyó el plan del Bigotón. Pasaron 15 años de ese duelo, pero sigue siendo uno de los más dolorosos para los fanáticos mexicanos.
En la jornada de ayer y a los 40 años, Maxi Rodríguez disputó su último cotejo como profesional y colgó los botines. Muchísimas personalidades importantes del mundo del fútbol le enviaron un saludo para felicitarlo por su extraordinaria carrera (como Messi), y uno de ellos fue Gerardo Martino, Director Técnico de la Selección Azteca. Ambos coincidieron en Newell`s Old Boys en la temporada 2012/13, donde fueron campeones del torneo argentino y terminaron de ganarse la idolatría del pueblo rojinegro.
El Tata se grabó en el predio del Tri y con mucha emotividad señaló: “Hola Maxi, quería acompañarte desde México en esta noche tan especial donde dejás atrás una carrera muy exitosa como futbolista y seguramente empezarás a recorrer un camino tan maravilloso en materia personal y profesional. Será, imagino yo, una noche de muchas emociones pero con el cariño y la calidez del hincha de Newell´s seguramente se transformará en una noche inolvidable. Fuerte abrazo y muchas felicidades”.
Maxi confesó que aquel gol fue insólito e irrepetible
En marzo del 2020 y en plática con Juan Pablo Sorín, Rodríguez admitió: “Son cosas que se dan en el momento, siempre digo eso, que Juampi (Sorín) no es de cambiar de frente, siempre lo hablábamos. Como te grité tanto, me la tiraste de lo pesado que era que te la pedía, pero en el momento cuando viene la pelota la quería acomodar para mi pierna hábil, para la derecha, pero como veo que el defensor va a cerrar el tiro, entonces giro en algo que sale natural”.
“Cuando la paro de pecho ahí digo que le pego y cuando sale al arco, la empalmo y ya veo el recorrido que se va a meter es impresionante. Creo que si pateo 10 millones de veces más puede terminar en la tribuna, me la puede sacar el portero, pero creo que en el momento que tenía que entrar, entró y eso fue lo lindo”, sentenció, abriendo la herida de los mexicanos.
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