El circuito de tenis vuelve a tener a una figura que supo alejarse por muchos años. Se retiró a los 29 años luego de haber ganado dos Grand Slams y de haber sido número 1 del mundo. Tras su alejamiento del deporte, incursionó en la política y supo hacer varios viajes a Perú en busca de ayahuasca. Ahora, Marat Safin está de vuelta, pero como entrenador de su compatriota Andrey Rublev.
Safin supo sorprender al mundo cuando en el año 2000 ganó el US Open venciendo en la final ni más ni menos que a Pete Sampras. Tenía 20 años en aquel entonces y un futuro enormemente prometedor. De hecho, pocos meses después, alcanzó el número 1 del ranking ATP.
Su familia siempre lo apoyó a él y también a su hermana, Dinara Safina, quien fue número 1 del ranking de la WTA en 2009. Sin embargo, Marat no pudo con su propios fantasmas. Es que así como estuvo en lo más alto del ranking, tuvo que esperar hasta 2005 para ganar su segundo Grand Slam, el Australian Open. También ganó dos Copas Davis (2002 y 2006).
En el medio, a Safin lo complicaron las lesiones, pero también su carácter poco paciente: año a año rompió decenas de raquetas en cada temporada. Si bien le sobraba talento, esas contras fueron los que le impidieron tener una mejor carrera y poder competirle mano a mano a Roger Federer y Rafael Nadal, en aquel entonces. Se retiró en 2009, a los 29 años.
Marat Safin, tras su retiro: pasó por la política y Perú fue su lugar de sanación gracias a la ayahuasca
Luego de su retiro como jugador profesional, Safin se alejó del tenis. Tuvo algunos ofrecimientos para seguir como entrenador o hasta como capitán de la Copa Davis, pero lo rechazó. Así fue como en 2011 se insertó en la política en Rusia donde fue diputado en el Parlamento ruso hasta 2016.
Después de su paso por la política de Rusia, se instaló en España donde le dio un vuelco a su vida dedicándose a la espiritualidad. En una entrevista con el diario Marca, replicada por Relevo, contó que viajó en reiteradas ocasiones a Perú, lugar que le dio paz y lo ayudó a superar su crisis, esa vista durante su etapa como jugador con su polémico carácter.
“Desde hace varios años voy a Perú para hacer ayahuasca. De hecho, es algo muy conocido en España. Poco a poco fui cambiando la mente y las prioridades. Cada vivencia que tengo me hago un tatuaje. La ayahuasca te viene a rescatar cuando tienes una crisis y tienes preguntas serias de la vida“, supo contarle al periodista Joan Solsona.
Así fue como la bebida psicoactiva, tan reconocida en el Perú, ayudó a Safin en su momento de reencuentro consigo mismo. Esto fue lo que le permitió superar sus crisis pasadas y lo que le permite tener este regreso al tenis como entrenador.
Marat Safin debutó como entrenador de Andrey Rublev en el Masters 1000 de Montecarlo
Marat Safin, a sus 45 años, volvió al circuito para ser el entrenador del también ruso Andrey Rublev. El primer torneo juntos fue el Masters 1000 de Montecarlo donde cayó en octavos de final ante el local Arthur Fils en dos sets. Esto será paso a paso, pero el tenista de 27 años sabe que tiene a la persona que supo idolatrar de joven.
“Yo siempre quise que trabajásemos juntos, pero sabía que a él no le interesaba. Y nunca quise presionarlo porque Marat me importa mucho. Luego descubrí que ya estaba listo“, apuntó Rublev hace algunos días en Montecarlo, según Relevo. “Entonces ahí pensé que no tenía nada que perder si se lo pedía. Mi agente (Galo Blanco), le preguntó, hablaron y empezamos a trabajar”, detalló.
¿Cómo seguirá el camino para ambos? Seguirán trabajando en la gira de polvo de ladrillo donde Rublev espera no sólo mejorar su rendimiento tenístico, sino también su cabeza y en eso Safin puede ser un buen apoyo.