(Por Leandro Brovelli) Un torneo más, una ilusión que se renueva, una hinchada sorprendentemente incondicional. Estas, entra otras, pueden ser las sentencias que epitomizan cada presentación de Racing. Pero en este terreno de pasión inagotable y fanatismos desenfrenados, ¿qué lugar ocupa el fútbol? Lamentablemente, su espacio es sumamente acotado. Más desconfianzas que certezas por parte de los defensores, poca creación de los mediocampistas y casi ninguna explosión por parte de los delanteros, dan forma a la primera presentación de Racing en el Cilindro. Claro, el humilde espectador se fue feliz y por lo menos esta semana tendrá el descanso de saber que no será el blanco preferido de burlas en los almuerzos laborales. A lo sumo algún que otro chascarrillo lo hará atragantar, pero el peso del debut con los tres puntos en casa lo harán correr con ventaja en esa batalla ritualista que nos ofrece el remate de cada fecha. “La bandera más grande del mundo” supo tapar cualquier fisura táctica. A nadie, o a muy pocos, les importó que Hauche no pueda hacer uso de los motivos por los cuales llegó a la institución, o que Bieler no haya pateado ni siquiera una sola vez al arco defendido por Cambiasso. En fin, las próximas dos fechas (primero Boca de visitante, luego San Lorenzo en casa) trazarán la encrucijada futbolística en Avellaneda: el temple de un equipo dispuesto a recuperar un lugar entre los grandes, o la mediocridad y decepción anual de saber que el único campeonato posible es salvarse de la Promoción. Mensaje para los diarios más leídos del país: la figura no fue Aveldaño, sino un ex Racing llamado Grazzini. Por sus pies pasaron las jugadas más interesantes y decisivas de All Boys. Mensaje para Racing Club: recuperar la identidad de un club no sólo es hegemonizar la propaganda pública en el puente que comunica la Provincia con la Capital, sino retener a esos jugadores que puedan llenar de alegría el espectáculo y, por qué no, darle más elementos a ese humilde espectador que fecha tras fecha defiende los colores en cada almuerzo laboral.

Fútbol - Página 29

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