No queda duda de que gran parte del enorme éxito que ha vivido el proyecto de los Astros de Houston recientemente se debe a la presencia del venezolano José Altuve y el puertorriqueño Carlos Correa.
Desde que Correa fuera seleccionado como el primer pick del Draft de MLB, la fanaticada de los Astros tuvo motivos con qué soñar, e incluso fueron coronados con el máximo premio en la Serie Mundial de 2017.
Ahora, el equipo tejano quiere seguir confiando en la sangre de los Correa, como demostró al seleccionar a su hermano menor, JC Correa, en la ronda número 38 del Draft de la MLB proveniente de Lamar.
Esto no viene como sorpresa, considerando que la organización de los Astros ya lo había seleccionado el año pasado en la ronda número 33, pero el prospecto decidió que lo mejor para él era volver a la Universidad.
En este sentido, la franquicia de los Astros aseguró sangre joven en las paradas cortas y, si bien será muy complicado arrebatarle el puesto de shortstop titular a su hermano mayor, queda claro que el equipo está en buenas manos en esa posición de cara al futuro.
Correa, sin embargo, no ha podido tener el impacto esperado esta temporada para los Astros, pues se encuentra marginado con una lesión y de momento no tiene una fecha prevista para su regreso.