Luego de naufragar en el ascenso argentino, San Martín de Tucumán consiguió el tan anhelado ascenso a la máxima categoría del fútbol de dicho país. Sin embargo, no todo es color de rosa para dicho conjunto.

Es que el popular club del norte argentino se encuentra muy complicado en la lucha por no descender, y, en ese contexto, despidió a Walter Coyette y recurrió a un director técnico que sabe de estos panoramas.

El elegido entonces fue Ricardo Caruso Lombardi, estratega con suma experiencia en equipos que pelean por no descender. Nueva prueba para el siempre polémico entrenador que dirigió por última vez en 2017, a Tigre.

Y la primera prueba del San Martín de Tucumán de Caruso Lombardi no es nada sencilla: frente a Lanús, conjunto que, con el arribo de Luis Zubeldía, mejoró de manera categórica en torno a lo que venía haciendo.

Pero claro, Caruso Lombardi siempre sorprende, y, en la previa de dicho compromiso, no hubo excepciones. ¿Qué hizo en esta oportunidad el Tano? Pidió achicar las dimensiones del terreno de juego.