Boston Celtics y Miami Heat se enfrentarán en las Finales de la Conferencia Este de los Playoffs de la NBA, en un duelo que será apasionante desde el día uno. Además, el enfrentamiento entre ambos equipos ha sido una mera constancia por mucho tiempo, siendo el último de ellos en el 2012. En aquella oportunidad, el equipo de LeBron James y compañía se llevó la serie en siete juegos.
El presente de ambos equipos es distinto al de esos años. Los Heat ya no tienen a la mejor plantilla de la NBA, por lo menos en la previa, mientras que los Celtics poseen un plantel totalmente rejuvenecido. A pesar de cómo llegó cada uno, la etiqueta de favorito la poseen los máximos ganadores en la historia de la liga. Aquí, contaremos las claves de Miami para hacerse con la serie.
El primero de ellos es Bam Adebayo. El pívot está jugando como un verdadero All-Star y, ese nivel en la pintura, puede ser más que una pesadilla para los dirigidos por Brad Stevens. Mucho más teniendo en cuenta dos factores: Pascal Siakam y Marc Gasol dieron muchas libertades en los duelos ante Toronto Raptors y, además, Boston suele encontrar allí puntos fáciles que con Adebayo será una historia distinta.
Este plantel de Erik Spoelstra ha encontrado una diferencia abismal con el resto de los equipos: la rotación efectiva. Los Celtics han carecido en muchas ocasiones de una segunda unidad eficiente (ante los Raptors funcionó decentemente), pero lo cierto es que Tyler Herro o el propio Kendrick Nunn, quien fue titular hasta la Burbuja, tienen más jerarquía que Semi Ojeleye y Brad Wanamaker.
Por último, es imposible no marcar a Jimmy Butler y los tiros de tres puntos como otro factor fundamental. Miami vive de la larga distancia y Butler es el jugador más clutch de los últimos años. Con su experiencia, ha ganado ese duelo a Kemba Walker, quien jamás llegó tan lejos en los Playoffs de la NBA y que, para colmo, jugó un sexto y séptimo partido dejando mucho que desear. Sin dudas, los Heat pueden vencer a los Celtics.
