Jonathan González tuvo que afrontar una difícil decisión, que se iba haciendo más latente a medida que su rendimiento subía más y más con el Monterrey: el de representar a Estados Unidos o a México. A fines del 2017, tuvo que tomar una decisión: se inclinó por el Tri.

Algo similar es lo que auguran que le pasará a su hermano, Adrián González.

Al igual que Jonathan, él acaparó la atención de muchos clubes cuando se destacó en el programa Sueño Alianza, uno de los proyectos más grandes a nivel de visoras entre la comunidad hispana en Estados Unidos. Su posición es el de volante ofensivo.

Con 15 años, ya ha sido invitado por nueve clubes de la Liga MX, tres de la MLS y uno de la segunda división de España. Además, México y Estados Unidos ya lo han tentado para que se sume a sus respectivas filas en las selecciones menores.

Se espera que este conflicto siga, y que, al igual que su hermano, estalle cuando crezca.