La eventual salida de Nahitan Nández tiene a Boca en vilo desde que inició el año y se convirtió en la novela del verano de un xeneize que no está para vueltas.
Por si fuera poco, en el club de La Ribera sobrepasaron la cantidad de extranjeros permitidos en el plantel y deberán deshacerse de uno de ellos para empezar la Superliga en condiciones.
El uruguayo era el apuntado para salir, ya que su representante pidió públicamente que su cliente sea el mejor pago del equipo y las ofertas por él desde Europa no tardaron en llegar.
Si bien su venta al Cagliari parece caída, sus mismos compañeros contaron que dentro del plantel, el tema es recurrente en la conversación.
"Al tema de Nández lo vivimos de afuera, estamos todo el tiempo preguntándole cuando se va porque le vamos a tener que cobrar multa si sigue faltando a los entrenamientos", contó entre risas Wanchope Ábila.
De todas formas, el delantero bancó la decisión del charrúa y recordó que mantienen la esperanza de que siga en el plantel: "Son decisiones personales, son momentos que viven los jugadores y temas que tienen que solucionar los clubes. Si se queda, para nosotros es fundamental lo vamos a recibir con los brazos abiertos".
