Claudio Caniggia, una de las figuras más emblemáticas en la historia de la Selección Argentina pese a no ser campeón del mundo, se llevó una sorpresa en su última salida a comer.

De un momento a otro, El pájaro creyó tener en frente a su hija Charlotte, ya toda una figura mediática, cuando tuvo enfrente a la imitadora Fátima Flórez.

"Mi papá me mata, me deja tomar shampein", le dijo Fátima a Caniggia en un acto de pura improvisación.

"Le sale bien", reconoció El Pájaro, que coincidió con la humorista en El Corralón, un tradicional bodegón de Buenos Aires.

Muy buena onda de los dos, ¿pero le habrá gustado a Charlotte?