En la noche de ayer, Brooklyn Nets derrotó con comodidad a Philadelphia 76ers por 109 a 89 en una linda exhibición de básquet.
A pesar de no jugar por estar lesionados, los flashes se los apropiaron Kevin Durant y Kyrie Irving, quienes vieron el encuentro desde una posición privilegiada.
Las estrellas del equipo protagonizaron un gracioso acto. Éste tuvo lugar en el tercer cuarto, cuando un alley-oop de Spencer Dinwiddie terminó con la volcada de Jarrett Allen.
Al ver esta tremenda jugada de sus compañeros, Kyrie se levantó de su asiento para festejar la anotación. Más tarde, se paró Kevin y fue directamente a empujarlo.
El ex base de Boston Celtics casi se cae y terminó en el medio del campo de juego. Obviamente, todo esto fue en modo de broma y todo quedó bien entre estas estrellas.