Óscar Washington Tabárez es un personaje histórico del fútbol sudamericano, no solo por lo que logró con la Selección Uruguay.

Por ejemplo, en Boca también dejó su marca, estando como entrenador del club en dos etapas: entre 1991 y 1993, y luego un breve período en 2002.

Allí logró ganar el Torneo Apertura y una copa internacional que tuvo pocas ediciones, llamada Master de Supercopa.

De igual manera, a pesar de su identificación con el Xeneize, el Maestro fue contundente al opinar sobre la final de la Copa Libertadores 2018.

“Boca no puede hacer nada para borrar la final de Madrid ante River, ni si quiera el paso del tiempo logrará borrarla.La única solución es mirar hacia adelante y tratar de conseguir cosas importantes en el futuro”, expresó en Super Mitre Deportivo.

Sin vueltas. Además, opinó del presente del club, sobre todo por la vuelta deJuan Román Riquelme, en el rol devicepresidente segundo porla lista de Ameal.

“Es muy buena la incorporación de futbolistas que tengan vivencias en los clubes, en el caso Riquelme son las más profundas que pueda haber, por el tipo de jugador que fue y por lo que le gusta.Un dirigente muchas veces no comprende el trato que debe tener con los futbolistas, tiene muchos elementos para llevar a cabo eso alguien que fue jugador y si es Riquelme, mucho más fácil se hace todavía”, explicó.

Ya sorteadas las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022, el histórico DT buscará volver a clasificar a su país a este tipo de competencia.