En Old Trafford, el teatro de los sueños, Manchester United estaba perdiendo ante el Crystal Palace, pero tuvo un penal a favor en el complemento.

Cuando todos pensaban que iba a ejecutarlo Paul Pogba, Marcus Rashford tomó el balón y la responsablidad de igualar el encuentro.

Sin embargo, el delantero de los Diablos Rojos explotó el balón contra el poste derecho del portero.

La pelota recorrió la linea de gol y se terminó despidiendo por el otro costado. Sí, saque de arco para el visitante.

Una lástima porque no fue un remate mal ejecutado, pero por unos centímetros el Manchester United sigue perdiendo.