Desde hace más de dos años que cada noticia del Barcelona no puede entenderse sin hablar de una situación económica tan singular como alarmante. Las cuentas del Camp Nou siguen al rojo vivo tras las gestiones de la era Bartomeu e igualmente gracias a una serie de decisiones de Joan Laporta que pasan factura a corto plazo. El club debe a otras entidades más de 200 millones de euros en fichajes.
Joan Laporta, presidente del Barcelona en los años dorados del Sextete, regresó a la entidad para asumir una situación sin precedentes, donde ni siquiera fue posible retener a Lionel Messi y donde cada medida se tomaba tras un riguroso análisis. La deuda total del club supera los 1.000 millones de euros. Recordemos que hablamos de un club de socios, no de una SAD y que no existen jeques que asuman dichos adeudamientos con empresas, clubes o diversos proyectos. Con otros equipos todavía hay que pagar 200 ‘kilos’.
Cabe recalcar que Laporta ha recuperado en algo la situación. Si bien el gasto en fichajes del pasado verano llegó a los 163 millones de euros no ayuda a la hora de pensar en una economía sana, la entidad se ha recuperado deportivamente con un título de LaLiga que supone el primer paso para dejar atrás la crisis. MARCA desvela como en la Asamblea General del día 21 de octubre, todos los datos serán puestos ante los ojos de los socios.
La gran mayoría llega de la presente directiva gracias a las imposibilidades de abonar la totalidad de los traspasos, pero hay otros que vienen desde Bartomeu y que complican aún más la trama. Hablando claro y rápido, Barcelona todavía debe 31 millones de euros por Robert Lewandowski a Bayern Múnich, Lech Poznan, Legia Varsovia, Delta Varsovia y Znicz Pruzskow y Borussia Dortmund. Los mecanismos de solidaridad, claves para entender esta lista tan larga. Los otros casos son más directos.
Por Frenkie De Jong restan por abonarse sumas que llegan a los 16 millones. Los casos de Raphina (24M al Leeds), Ferrán Torres (13M a Manchester City), Jules Koundé (11.8M a Sevilla) o incluso caras viejas como Miralem Pjanic (1M a Juventus), patas de un contexto que por supuesto pasa factura en el día a día. Los plazos de pago son distintos en cada caso. Si no se cumplen (de momento todo va en regla), puede haber denuncias o sanciones de FIFA. Es un camino largo para la entidad.
Barcelona todavía debe cobrar por varias ventas
Pero no todo son malas noticias en este sentido. Barcelona todavía debe cobrar por ventas y es ahí donde la situación de momento se destraba. A los 100 millones de euros recibidos por la transferencia de activos lejos del Camp Nou en el presente verano se suman otras deudas. Estas permitirán que a corto plazo no incumpla el Fair Play Financiero. La marcha de Ousmane Dembelé al PSG por casi 50M ayuda y mucho. No es la única que reportará dinero pronto.
Barcelona pide tiempo para ajustar su economía
Chelsea todavía debe 5,9 millones por Pierre Aubamenyang, Atlético de Madrid 8,8M por Antoine Griezmann (también 2M por Depay), Leeds United 4,8M por Junior Firpo, así como Wolverhampton o Sporting Lisboa 6M por Francisco Trincao. Eduardo Romeu, vicepresidente del club, pide calma en Mundo Deportivo de cara a volver a poner en verde las cuentas del club. Su mensaje, con fechas incluidas: “Pedimos cuatro años de paciencia para poder revertir la situación del club”.